La ciudad de San Diego posee uno de los mayores legados hispanos dentro de los Estados Unidos.
Quienes visitan la ciudad tienen la oportunidad de encontrarse con una cultura e historia cargada de esencia hispana. Quizá la cercanía con México y su gran presencia de raíces españolas hagan de esta ciudad un ícono de características hispano/latinas. Esta influencia se ve reflejada incluso en su gastronomía, pero también en su arte y en la gran cantidad de eventos o festivales característicos que se realizan durante todo el año.
Esta localidad fue fundada en 1769, año en que se dio origen a la misión conocida como “San Diego de Alcalá”, la cual fue llevada adelante por Fray Junípero Serra. De todos modos, su origen hispano se remonta a muchos años atrás en el tiempo, tal como lo expresan sus símbolos oficiales y diferentes referencias de la época.
Según los datos históricos, en septiembre del año 1542 en algún lugar de la bahía de San Diego, al sur de California, arribó el primer barco europeo a lo que hoy es Estados Unidos. Esta fragata española, comandada por Juan Rodríguez Cabrillo, tenía como nombre San Salvador y tocó tierra en la costa oeste, dando inicio al legado histórico español de la ciudad.
En los símbolos de la ciudad de San Diego -tales como el sello oficial y la bandera- se pueden encontrar los elementos que refieren a la influencia española en la región.
La bandera de San Diego posee el color rojo y dorado que se eligieron en honor a España, que fuera quién dio inicio a la ciudad.
En su bandera y debajo del sello que se ubica al centro de la misma encontramos escrito el año 1542, que hace referencia al año en que el español Juan Rodríguez Cabrillo ingresó a la bahía de San Diego, comenzando así el dominio hispano en la zona.
En el sello se encuentran varios elementos más que hacen referencia al legado español: una carabela como representación de las expediciones españolas; la campana de la parte superior simboliza a las misiones de los comienzos y que marcaron su fundación. También posee a los costados dos columnas de Hércules que hacen referencia a la jurisdicción de España en la antigüedad.
El sello representa a un escudo de armas que se encuentra insertado dentro de un círculo. En ese círculo que rodea al escudo pueden leerse los nombres del estado, de la ciudad y el lema de la ciudad “Semper vigilans” que quiere decir “Siempre vigilante” o “Siempre atento”.