En el segundo viaje a América en 1493, Cristóbal Colón descubrió una isla que bautizó como San Juan Bautista, fundando también la ciudad de Puerto Rico.
Fue debido en parte a la labor de Juan Ponce de León en 1521 que se realizó el intercambio de los nombres, bautizándose a toda la isla con el nombre de Puerto Rico.
Como parte de un ambicioso proyecto de convertir a la isla en una fortaleza militar, se construyeron murallas rodeando toda la ciudad de San Juan. Con el fin de protegerse de sus enemigos europeos, España realizó construcciones que poseían paredes de hasta seis metros de espesor, como el castillo del Morro. Algunas partes se han conservado hasta la actualidad.
A su llegada a la isla en 1508, Juan Ponce de León fundó el primer asentamiento denominado Caparra.
Un año después fue nombrado gobernador de la isla. Este rápido control del lugar fue posible en gran medida a la buena relación del conquistador con el cacique nativo Agüeybana. Ponce de León debió renunciar el cargo en 1511 a raíz de la disputa que tenía con Diego Colón, hijo de Cristóbal Colón.
La gran mayoría de los conquistadores españoles venían en busca de oro y para poblar la isla se mezclaron con las mujeres nativas, ya que no traían mujeres en los barcos. En la isla Borinquen, según el nombre que le daban los indígenas y que aún persiste hasta la actualidad, los nativos han sobrevivido a diferencia de otras partes del Caribe.
A medida que el oro empezaba a escasear, se dio inicio en la isla a la ganadería y también al desarrollo agrícola con plantaciones como el tabaco, el café y la caña de azúcar. Luego de que España cediera autonomía a Puerto Rico y los isleños eligieran su primer gobierno, el Ejército Americano invadió la isla y mediante el tratado de París fue cedida a los Estados Unidos en 1898. Ya para el año 1917 todos los residentes de Puerto Rico pasaron a ser ciudadanos estadounidenses y en 1952 de manera voluntaria, la isla pasó a ser un Estado Libre Asociado de los Estados Unidos.
En la isla se mantiene un status territorial amparado bajo la constitución de los Estados Unidos; de este modo Puerto Rico forma parte de los Estados Unidos pero no pertenece directamente. Hasta hoy se mantiene el debate sobre si Puerto Rico debe mantener su condición actual de Estado asociado, pasar a ser el estado número 51 de los EE.UU. o buscar su autonomía.
Allá por el año de 1511 la Corona Española, a través de Fernando de Aragón (el entonces rey de Aragón y regente de Castilla) entregó el escudo que, según algunos historiadores, es uno de los más antiguos del Nuevo Mundo. Recién en el año 1905 fue aprobado como primer escudo de armas de Puerto Rico. Luego de varias enmiendas e investigaciones concernientes para llegar a la interpretación auténtica del escudo, este se aprueba y es adoptado definitivamente en el año 1976.

Este símbolo posee gran cantidad de referencias a la herencia española y que hacen a su historia, cultura, religión: en el centro se encuentra un cordero con el cual se simboliza comúnmente a San Juan. El mismo se encuentra sobre un libro con los siete sellos del apocalipsis. Puede encontrarse además un castillo de oro simbolizando a Castilla. Por otro lado, un león en campo de plata simbolizando al Reino de León.
Las 16 piezas que se encuentran en el borde del escudo llevan ilustraciones que representan al Reino de Castilla. Los reinos de León y Castilla unidos están representados por una bandera de castillos y leones. Posee además una cruz de Jerusalén.
La corona real en la parte superior representa el dominio de aquellos que gobernaban en el momento de ser descubierta la isla.
A la izquierda del escudo se encuentra la letra “I” de Isabel y a la derecha la letra “F” de Fernando el Católico. Bajo estas letras se pueden ver las flechas y el yugo representando la unidad de los respectivos reinos. La inscripción inferior que en latín reza “Joannes Est Nomen Ejus” significa “Juan es su nombre”. El fondo verde, según diferentes interpretaciones podría representar la esperanza, la cortesía y la virtud, o bien puede ser símbolo del vasto territorio isleño.
Sin lugar a dudas este escudo con toda su representación del legado hispano es una verdadera reliquia que nos muestra los orígenes de la isla de Puerto Rico.