Los integrantes de la Comunidad Hispana/Latina y cómo organizan la actividad de la familia durante el período de verano
La gran mayoría de las familias que tienen hijos deciden, en una gran mayoría, lograr que sus niños tengan actividades de campamento o actividades de grupo, ya que la mayor parte de la familia continúa con sus quehaceres y obligaciones.
También este receso de verano hace que muchas familias envíen a sus hijos para que visiten a sus tíos, abuelos y primos en los países de origen. Esto es una actividad que los niños celebran mucho y que tiende a crecer.
Otra actividad muy común es que se hagan salidas con la totalidad de la familia y sobre todo cuando los principales sostenes ecnómicos del grupo familiar pueden planear las vacaciones, de modo que sus obligaciones de trabajo no se interpongan.
Más allá de las actividades, las vacaciones familiares se presentan año tras año, por lo que, cuando se hace un presupuesto familiar es importante que figuren los costos estimados reservados para esa importante actividad.
De acuerdo a estudios realizados, en donde se preguntaba a los jefes de familia cuánto era la partida que se establecía para unas breves vacaciones, se pudo conocer que rondaba entre los 250 a más de 500 dólares por persona.
Un tema importante es considerar si los costos de vacaciones se pagarán con dinero en efectivo o tarjeta de débito, o bien a crédito.
Para lo último, es importante que los costos, independientemente del modo en que se pague, refleje una capacidad financiera “real” ya que, de otro modo, pagar gastos con tarjetas de crédito no sería lo ideal, salvo que refleje lo presupuestado, pues tener que llevar mucho dinero en efectivo cuando se está lejos de casa, con rutinas diferentes, hace que sea más complicado que no se produzca extravío de dinero. Siempre se podrá tener el auxilio de las tarjetas de débito.
Además, cuando tenemos los comprobantes de gastos de pagos con tarjeta, siempre que reflejen los importes presupuestados, hacen más fácil el control del presupuesto en el día a día, incluso durante las mismas vacaciones.
La importancia de no tener que pagar por todo lo que provea esparcimiento
Muchas familias conocen las actividades que se desarrollan siempre en los lugares de veraneo, que involucra muchas veces a todos los integrantes de la familia y que son actividades gratuitas.
Es tan importante efectuar una buena planificación con la elaboración del presupuesto adecuado, con la indicación de los gastos que se pagarán con tarjeta de crédito, y cuales con tarjetas de débito o dinero en efectivo.
El paso siguiente es ir “dándole un vistazo” a nuestras partidas presupuestadas para poder hacer los ajustes sobre la marcha. Esto puede parecer mucha actividad para una salida de vacaciones pero, tan solo para dar un ejemplo, si tenemos una partida para la alimentación dentro del presupuesto, eso nos dará un término medio o promedio a priori. Por lo tanto, no será excesivo ver luego de unos días como andamos con este rubro, y si se hicieron salidas a comer afuera, entonces pueden compensarse con preparación de alimentos en el lugar de alojamiento, etc.
Independientemente de como se planifiquen las vacaciones familiares, hay elementos que son fundamentales:
- De cuánto podemos disponer para destinar a los gastos de vacaciones.
- Dentro de ese importe, como lo financiaremos.
- Y es fundamental el control presupuestario, para que el regreso no venga con sorpresas.
Lo fundamental es hacer las cosas paso por paso, en donde todo comienza con la decisión de tomar las vacaciones, con los lugares y el modo en que organizaremos la salida, con el recuerdo de los lugares a donde querríamos volver o visitar por primera vez. También la necesidad de establecer el o los medios de transporte a utilizar y como alojarse durante ese tiempo. Todas son acciones imprescindibles, para poder contribuir al goce en familia y a un merecido descanso, siempre con la mejor utilización de los recursos.